Vince Benedetti con la Big Band de GranadaTeatro Isabel la Católica. Miércoles, 8 de noviembre.
Gregorio Buendía, Miguel Ángel Romero, Antonio Alba y Antonio G. Maroto, trompetas
Daniel Anarte, Juan Manuel Pamblanco, Manuel Vargas y José Antonio Rodríguez, trombones
Rogelio Gil y Juan José Rodrigo, saxos altos
Agustín Sánchez y Antonio González, saxos tenores
Toto Fabris, saxo barítono
Celia Mur, voz
Alejandro Serrano, piano
Guillermo Morente, contrabajo
Julio Pérez, batería
Kiko Aguado, guitarra y dirección
Invitado especial: Vince BenedettiRafael MarfilLa Big Band. Aquel sueño de algunos viejos jazzman de la ciudad, que aún son el alma de la orquesta. No es la Alhambra, pero
deberíamos sentirnos orgullosos de esta formación en Granada, que ha vuelto a estar a buen nivel en la tercera jornada del Festival.
En esta ocasión
el invitado ha sido Vince Benedetti, un músico con muchas horas de vuelo, que tiene apellido de escritor hispano y aspecto de profesor de literatura inglesa. Tras una apertura en solitario con el eternamente bello Round Midnight,
se podía intuir el estilo del pianista en los arreglos que ha preparado para la orquesta: Elegante, clásico, lúcido y sentido. Esa perfección ha dejado bastante satisfechos a los más puristas. Se le agradece enormemente la preparación de discursos didácticos sobre la estructura de los temas, su razón de ser e incluso los instrumentos protagonistas. Hemos conocido así algunos arreglos propios basados en grandes clásicos, como el Alone Together y un bello homenaje a la suave heroicidad de John Coltrane en los años 50. Una década después llegaría la revolución con un nuevo estilo más explosivo. Hubo tiempo también para seguir las reglas del blues y hacer un homenaje a la época del Soul Jazz.
Buena nota para la veintena de músicos que conforma la Big Band. A la seguridad de la sección rítmica y el discurso maduro del director guitarrista Kiko Aguado, se une el acierto y trabajo de los saxofonistas Rogelio Gil, Agustín Sánchez y Antonio González, con las aportaciones del trompetista Miguel Ángel Romero y el trombón de Daniel Anarte. La vocalista Celia Mur, con esa profundidad inconfundible, interpretó el estándar Take the A train. Aún cada uno de los músicos podría soltarse más. Y seguro que el público se lo agradece. Aunque el auditorio estaba frío al principio, consiguió finalmente un bis improvisado. Son casi profetas en su tierra, y eso ya es mucho.